ENTRE DRAGONES Y PINGÜINOS


The Banner Saga, un largo descenso hacia las tinieblas

28 de ago. de 2024 - #Videojuegos

Hace ya muchos años que hice mi reseña del primer juego de “The Banner Saga”, y fui siguiendo la franquicia con lentitud porque tengo de la manía de evitar escribir críticas hasta que doy algo por terminado. En el caso de estas 2 secuelas se les añadió una serie de modos extra que llevaron a que la experiencia se haya prolongado durante años, pero tampoco había ninguna prisa en obtener el 100%.

En la parte técnica no hay grandes cambios: ilustraciones a mano con un gran trabajo a la hora de hacerte sentir minúsculo ante la escala de los eventos, combate táctico entretenido y gestión de recursos correcta. La maravillosa música de Austin Wintory para acompañar a la acción y el drama es uno de los puntos más fuertes, destacando el tema vocal del grupo Árstðir, “Our Steps to the Night”, que es una verdadera joya.

Cada nueva entrega permite importar la partida de las anteriores, continuando la épica historia de los personajes que vayan sobreviviendo a los avatares del viaje, mientras se enfrentan al final del mundo tal y como lo conocían. No quiero daros detalles concretos sobre la historia porque sería estropear las sorpresas, asi que me limitaré a comentar por encima los puntos más fuertes:

Imagen donde varios personajes de diferentes facciones forman una fila a través de un paraje oscuro y desolado de roca y hielo. Pasan bajo el brazo de una estátua de un guerrero gigante, teniendo como únicamente fuente de luz un hechizo que rodea a la comitiva. Humanos, *varls* y *dredges* continuan avanzando al frente, con aspecto agotado.

El modo historia viene acompañado de modos de supervivencia y la “batalla eterna”, que consisten en una serie de desafíos tácticos periódicos, que si queremos completar al 100% deberemos jugar hasta alcanzar la equivalencia a 3 años. Por un lado la idea es buena para mantener el ritmo episódico, pero por otro acaba siendo una forma artificial de alargar el juego reciclando los mapas que componen toda la franquicia, y se acaba haciendo pesada.

En conjunto ha sido una historia muy disfrutable, que se disfruta más si se juega en sesiones relativamente cortas: haz avanzar a la caravana unos pocos días disfrutando de los sobrecogedores paisajes, resuelve un puñado de eventos y combates, y apárcalo hasta la próxima sesión de juego. Avanzando de forma lenta pero segura,acaba siendo una cadena de de decisiones muy memorables que nos acompañarán en nuestra memoria por mucho tiempo.

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